El Parque Nacional Iguazú, la empresa que explota la maravilla del mundo, junto a la administración del Parque Nacional tomaron la decisión de cerrar de forma preventiva el circuito Garganta del diablo por la crecida del río Iguazú.
Según datos oficiales, hoy el caudal de agua ya había alcanzado 4.800 metros cúbicos y se espera que para mañana el número aumente a 8.000 metros cúbicos, por lo que el circuito se convirtiría en peligroso, razón principal por la cual se vallaron todos los ingresos.
Las represas brasileras ubicadas aguas arriba de las Cataratas informaron que debido a la crecida del río abrirán compuertas que provocarán que el caudal de agua aumente de forma extraordinaria. Atentos a este comunicado desde la dirección del Parque decidieron el cierre.
Los servicios náuticos de paseos en gomones y lanchas siguen funcionando, a la espera la evaluación de Prefectura Naval Argentina.
