Arqueología | Hallan por vez primera un artículo de lujo mencionado en la Biblia

Los exquisitos paneles de marfil son del tiempo de la destrucción babilónica de Jerusalén (586 a.C.) y podrían provenir del Primer Templo.

Por primera vez, los arqueólogos encontraron evidencia de un artículo de lujo mencionado en la Biblia: pequeños paneles de marfil que habrían estado incrustados en muebles de madera durante el período del Primer Templo en la antigua Jerusalén, anunció este lunes la Autoridad de Antigüedades de Israel.

Los paneles de marfil se encontraron junto a la Ciudad Vieja de Jerusalén, al sur del Monte del Templo, en los restos de un edificio monumental que data de los siglos VIII y VII a.C., fecha del apogeo de la ciudad, antes de que ser destruida durante la conquista babilónica en el año 586 a.C. Estaban muy deteriorados, pero ahora se muestran tras haber sido cuidadosamente restaurados.

Esta es la primera vez que se encuentran incrustaciones de muebles de lujo hechas de marfil en la antigua Jerusalén, informaron Reli Avisar, Yiftah Shalev, Harel Shochat, Yuval Gadot e Ido Koch en la revista Atiqot («Antigüedades»).

 

Este hallazgo corrobora las menciones que se hace varias veces en la Biblia, siempre en el contexto de personajes ricos y poderosos. Así, se dice del legendario rey Salomón que “hizo también el rey un gran trono de marfil, el cual cubrió de oro purísimo.” (1 Reyes 10:18).

También el libro de Ezequiel (27:4-6) menciona el marfil en el contexto de las bellezas de la ciudad de Tiro: “En el corazón de los mares están tus confines; los que te edificaron completaron tu belleza. De hayas del monte Senir te fabricaron todo el maderaje; tomaron cedros del Líbano para hacerte el mástil. De encinas de Basán hicieron tus remos; tus bancos de pino de las costas de Quitim, incrustados de marfil”.

 

Otros aspectos

El marfil en el antiguo Medio Oriente se derivaba de colmillos de elefante, y entonces, como ahora, el marfil se consideraba un artículo de prestigio, especialmente cuando estaba tallado y decorado de manera exquisita; como estos encontrados.

¿De dónde podría haber venido el marfil, ya que los elefantes se extinguieron en Israel hace miles de años? Tuvo que haber sido importado, ya sea como un colmillo o en forma terminada, probablemente de Asiria, y probablemente funcionó allí.

“Los marfiles pueden haber llegado a Jerusalén como un regalo de Asiria a la nobleza de Jerusalén. Tras una comparación con los objetos completos que aparecen en las placas murales del palacio del rey asirio Senaquerib en Nínive, sugerimos que las placas de marfil de Jerusalén estaban originalmente incrustadas en un sofá-trono, y podemos imaginar que había estado situado en el segundo piso de la opulenta estructura”, declararon Gadot y Shalev.

Algunos de los paneles estaban decorados con marcos y grabados con formas de rosetas, en el centro de los cuales había un árbol estilizado. Otros llevaban flores de loto y algunos un patrón geométrico.

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